lunes, 22 de diciembre de 2014

SI MAÑANA SE ACABARA TODO

Si me quedaran unos días de vida pensaría que es una pérdida de tiempo quedarme en casa comiendo como una cerda y vomitando como una enferma mientras lloro por lo inútil, estúpida y sola que me siento.

Pensaría que es una pérdida de tiempo culpabilizarme y machacarme hasta hacerme llagas imaginarias en mi piel que cada vez son más profundas y más difíciles de curar.

Pensaría que es una pérdida de tiempo flagelarme mientras me quedo inmóvil viendo mi vida pasar sin moverme ni un ápice. 

Pensaría que es una pérdida de tiempo quedarme inmóvil por miedo a lo que puedan pensar los demás por cada uno de los pasos que doy, o peor aún, de los pasos que no doy. 

Pensaría que es una tontería inmovilizarme por el miedo al qué dirán y no dejaría que eso marcara mi forma de actuar.

Seguramente sería fiel a lo que siente mi corazón, no pensaría tanto las cosas y actuaría más.

Dejaría de ahogarme la idea de que tengo miles de ojos en la nuca que no me dejan respirar y que me juzgan hasta chafarme como a una cucaracha que se cruza en su vida con un mocasín de la talla 45. 

Dejaría de repetir ideas obsesivas en mi cabeza que me arrancan de cuajo el saquito de autoestima que estaba llenando y que de un golpe decidí que debía vaciarlo como cenizas por un acantilado.

Seguramente empezaría a vivir, a vivir mi vida en base a mí y no a los demás. Empezaría a creer en mi intuición para después consultar con los demás y no al revés dejándome a mí para el final.

Empezaría a preguntarme más a mí misma y a escuchar cuales son mis deseos perdiendo el miedo a lo que pueda contestar mi interior. 

Quizá ese sea mi miedo ahora, preguntarme que quiero realmente, porque quizá la respuesta que voy a encontrar requeriría una gran valentía que no sé si estoy dispuesta a afrontar ahora mismo.


Al final te das cuenta de que para todo eso no hace falta que se acabe el mundo mañana, sino que se puede empezar ya mismo.

...Shine on you crazy diamond...