sábado, 12 de enero de 2019

QUE EMPIECE EL JUEGO

Hace casi 2 años que no paso por aquí. Ahora delante de este ordenador, no soy la misma que me etiquetaba como comedora compulsiva. Sigo poniendo el foco muchas veces en la comida, pero no me hace sufrir de esa manera. Sigo sintiendo como mérito el hecho de que durante esta Navidad haya dejado la bandeja de dulces de casa de mis padres igual que estaba, llena, sin ningún  esfuerzo además. Sigo sintiendo nostalgia por fotos en las que estaba más delgada, pero lo más importante es que no siento rechazo al verme en fotos en las que pesaba mucho más. Sigo pensando en ocasiones que ciertos alimentos son "veneno" (por antiguas etiquetas que les puse) y me cuesta introducirlos a veces en la dieta. A veces sigo sintiéndome mal si paso una tarde en el sofá y acabo haciendo 3 meriendas. Y  a veces, las más últimamente, disfruto.

En estos últimos años han pasado varias cosas. Irme a vivir con mi pareja, acabar la especialidad de medicina familiar y comunitaria e iniciar la formación en Terapia Gestalt, última en la lista, pero clave.

El irme a vivir con mi pareja me ayuda en el sentido que cocinar para 2 o que me cocinen me lo pone todo mucho más fácil. Eso no quita que tenga tardes (sobretodo) de soledad que me hagan revivir momentos temidos en el pasado y  que desate mi ansiedad.

Acabar la especialidad me abre ahora mismo un mundo de posibilidades, un camino sin escribir que yo decido como rellenar. Esto a la vez que entusiasmarme, me da pánico. Nunca supe si mi camino era ser médico y aún sigo dudando de ello, pero desde primaria, mi camino se iba rellenando con bloques que no estoy segura de haber puesto yo. Es curioso cuando le gente me dice: ¡pero si has estado estudiando durante 11 años será porque te gusta! A lo que yo respondo: Tener una venda en los ojos y no quitársela es mucho más fácil que arriesgarse a mirar y ver lo que quieres o más difícil, lo que sientes. Con esto no digo que quiera replantearme toda mi vida, sólo sé que tengo más inquietudes y que esto no acaba aquí.

Y la Gestalt. La encantadora a la vez que cabrxxx Gestalt. Formación vivencial 100%. No te puedes escapar. Te podrás dar atracones de comida si quieres, pero tendrás que mirarte en algún momento y afrontar todo lo que tienes ahí. Tomar conciencia de cómo actúo y por qué lo hago es la única forma para poder sanarlo. Iba a decir cambiarlo, pero nos bombardean con mensajes de todo lo mal que estamos y de todo lo que tenemos que cambiar de nosotrxs mismxs por lo que es un término que creo que tengo que utilizar con pinzas para que no se vuelva en mi contra. Yo estoy bien como estoy y cualquier cambio es bienvenido.

Tengo dudas. Estoy en un momento de Stand By, momento que no me habría permitido en otros tiempos o que si lo hubiera hecho habría acabado con atracón al minuto cero porque: "si dejo el trabajo pensarán que soy una vaga", "si dejo la medicina qué pensará de mí mi família", "seré una fracasada"... Pero el verdadero fracaso es no escucharme y no seguir mi instinto por muy difícil que me lo ponga mi "jueza dictadora".

Que empiece el juego.